miércoles, 16 de diciembre de 2015

Picos Aketegi (1.548m) y Aitzkorri (1.523m) en circular por el Paso de la Ermita de San Miguel


La sierra de Aitzkorri se ubica en la divisoria entre el Golfo de Vizcaya y el mediterráneo.  Compone el centro del Parque Natural Aitzkorri-Aratz y se alza vertiginosa con su colorido verde y gris calizo sobre las campas de Urbía.  Además, como es el único macizo que supera los 1.500m de altitud en todo el País Vasco, allí nos vamos hoy Bonito del Norte, su amiguito Cres y Servidora de Ustedes, guiados nuevamente por el amiguito Ra.


Estos picos son fácilmente alcanzables desde el Santuario de Arantzazu pero me acompañan tres aguerridos mocetones vascos que ansían enseñarme las bellezas de su tierra, así que eligen el trayecto más largo para lo cual aparcaremos en el parking de San Adrián y no me pregunten ustedes cómo llegar, que me han traído mientras yo echaba una merecida cabezadita limpiando los potes de anoche… ¡que dura la vida de vacaciones en Euskadi, oiga!.


En el propio parking sale un camino que tomaremos a nuestra izquierda siguiendo las indicaciones de San Adrián-Urbia.  Cruzamos un barranco gracias a un puente de madera y superamos una cuesta que nos lleva al Refugio de San Adrián.  Aquí nos topamos con el Camino de Santiago y un par de GR’s más que seguiremos hacia nuestra izquierda, dirección Urbía y en suave pendiente por pista alcanzaremos el Paso de San Adrián: un corto túnel que atesora la Ermita homónima (más información AQUÍ).


Al salir del paso, nos encontraremos con la Calzada Romana o Camino Real que unía Euskadi con las Castillas, es la GR121 que transitaremos a través de un precioso bosque de hayas hoy decorado por una intensa niebla que le confiere un toque misterioso y medieval que nos hace imaginar las andanzas de Romanos, Caballeros y Reyes por estos lugares.



Sobre la cota 1.150m aproximadamente, abandonamos la GR121 y giramos a nuestra derecha por una senda que sigue atravesando el bosque en claro ascenso en busca del acceso al ramal GR121.4 que transitaremos tranquilos mientras el bosque desaparece y se convierte en los verdes prados de las Campas de Urbía.

A nuestra derecha se yergue la mole kárstica de Aitzkorri, pero las nubes y el intenso viento apenas nos dejan adivinar su silueta mientras nos dirigimos firmes hacia una Fonda … ¡una Fonda!... donde paramos a almorzar unos “pintxos” de chorizo con su correspondiente botella de sidra, que nos lo hemos ganado.




Saciados y contentos continuamos camino en clara dirección a la mole del Macizo que atesora nuestros objetivos de hoy.  No hay pérdida pues aquí nos unimos al camino que viene desde Arantzazu y nos encontramos con las típicas hordas de lugareños que tienen nuestro mismo objetivo.  Nos dirigimos por pista hacia la Majada de Arbelar: una especie de villa que atravesaremos y en cuyo centro nos desviaremos a la izquierda siguiendo las marcas amarillas que indican el itinerario hacia la cima del Aitzkorri.


Por senda muy bien marcada, afrontamos la durísima cuesta primero por hierba y después por suelo kárstico siguiendo las marcas hasta toparnos con una veleta.  En este punto abandonamos la senda principal por nuestra izquierda para superar una durísima cuesta que nos llevará directos a la cima del Aketegi.  Hace un viento helador y la niebla nos tapa completamente las vistas, así que a pesar de que el plan es continuar por la arista, decidimos emprender la bajada sobre nuestra derecha por algunas trazas pisadas en busca de la senda principal.




El terreno se hace más amable y la senda, al estar más transitada, resulta mucho más cómoda.  A pesar de ser helador, el viento va dispersando a ratos las espesas nubes para enseñarnos la belleza de las afiladas aristas que van quedando a nuestra izquierda mientras nosotros acortamos distancia con nuestro objetivo final.  El Aitzkorri nos recibe coronado por una especie de buzón con forma de hacha clavada en un madero y algo más abajo la Ermita del Santo Cristo y un refugio donde, valga la redundancia, nos refugiaremos a comer.



 

Llevamos una buena pateada y aún nos queda el descenso que acometeremos tal como salimos del refugio de frente, por senda muy clara en clarísimo descenso por una faja que supera las profundidades de los típicos agujeros calizos característicos de estos terrenos.

 

Pronto quedan detrás nuestro la Ermita y el refugio mientras nos adentramos en el bosque que atravesaremos en un descenso infernal por el camino cubierto de las hojas recién caídas que nos hacen caminar prácticamente a ciegas sin saber dónde colocamos los pies y resbalando dos de cada tres pasos.  Este descenso resulta tan penoso como veloz y tal como empezamos a quejarnos del cansancio, el terreno se suaviza y poco a poco nos regresa al Paso de San Adrián, donde nos adentramos encantados de la preciosa excursión que estamos a punto de culminar.

 

Preciosa excursión sin mayor dificultad que su longitud y potente desnivel.  Mi recomendación personal es realizarla en sentido contrario al nuestro y subir por donde nosotros bajamos para luego volver por las Campas de Urbía y la Calzada Real parando, por supuesto, a comer en la Fonda pues a pesar de que quedará un trecho largo para después, éste es muy amable e ideal para ayudar a la digestión.  Nosotros terminamos celebrando la triunfada, como no podía ser de otra manera, con una botella de sidra en un bar de Otzaurte.
 
 

AQUÍ el track
 
Fecha real: 09/12/2015
 
Desnivel acumulado: 1.035m
 
Distancia recorrida: 16km
 
Tiempo invertido: 7h





viernes, 11 de diciembre de 2015

Peñas de Aia: Peña Irumugarrieta (806m.) desde las Minas de Arditurri


La primera vez que visité Donosti guiada por Bonito del Norte, me fijé en un pequeño macizo pedregoso y denteado que me provocó.  Han pasado años desde entonces pero nunca hemos tenido el tiempo y/o las ganas de acercarnos a este lugar.


Las Peñas de Aia se caracterizan por ser el único macizo granítico existente en todo el País Vasco, se encuentran protegidas por la figura de Parque Natural y son visibles casi desde cualquier parte de San Sebastián, hecho el cual las convierte en lugar de visita obligada entre lugareños y foráneos como servidora que hoy se lanza a la conquista de estas primeras estribaciones pirenáicas junto a mi incansable Bonito y su amiguito Ra que hoy nos hace de guía.


Como me llevan, no tengo ni idea de dónde hemos aparcado… digamos que en las inmediaciones de las Minas de Arditurri en un parking que está bastante vacío.  Esta no es la ruta normal a las Peñas de Aia que son tres: Irumugarrieta, Txurrumurru y Erroilbide, sino una variante más larga que me servirá para una toma de contacto completa con este magnífico entorno.

Empezamos a caminar ya con la vista de las Peñas delante nuestro siguiendo una pista que enseguida se adentra en las instalaciones de las Minas de Arditurri cuya historia no os cuento que para eso tenéis su web AQUÍ.  Nuestro primer objetivo es la Borda de Unai, a la que llegaremos transitando primero un ancho camino paralelo al Barranco de Arditurri a nuestra izquierda y sorteando un bosque mixto caducifolio predominado por altos robles de los que alguno aún conserva algo de hoja para mantener un poco de color del otoño que está presto a terminar. Estamos sobre la PR-GI 1009 y queremos alcanzar la GR121.



Cuando la vegetación se convierte en hayedo, dejaremos las delicias de esta cómoda senda para atajar la ladera por una senda mucho más empinada que nos hará ganar toda la altura necesaria para cruzarnos con la GR121 y hacia nuestra izquierda alcanzar el alto de Elurretxe,  lugar desde el que sale la ruta normal que ahora enlazaremos para unirnos a las hordas de humanos que hoy Domingo salpican estos caminos y me ponen nerviosa en un entorno que no es el mío.


Giramos a nuestra derecha todavía por el hayedo que pronto cederá paso a las verdes y empinadísimas laderas que nos auparán a una primera cota: el Mugani (758m) donde se abren las vistas al abrupto entorno de las Peñas que nos llaman.  A partir de aquí, la progresión se complica y nos encontramos en un ambiente bastante más hostil de lo que me habían hecho creer las reseñas. 


Avanzamos por sendero muy indicado en un sube y baja por terreno muy empinado hasta encontrarnos con el contrafuerte de la primera peña.  Primero bajaremos a un pequeño collado para afrontar una travesía que ya nos pide cuidar el paso y colocar alguna mano para enseguida superar una canaleta en la que sí deberemos utilizar las manos para mantener el equilibrio.  Finalmente llegamos a la cima del Irumugarrieta que nos recibe muy ventoso pero agreste y bello como sus hermanos que nos provocan aquí al lado.  Un par de fotos y ponemos rumbo a la segunda peña que nos espera llena de gente.


Vamos caminando atentos y con cuidado mientras un grupo de chavales se nos acerca… unos nos adelantan y otros nos siguen por la cresta poco complicada pero ambientada hasta que nos topamos con un destrepe.  Mientras guardo los bastones me vuelven a adelantar dos muchachos y comienzan a ayudar a sus compañeras.  Cuando llevamos unos diez minutos esperando, decidimos darnos la vuelta.  Demasiada gente, demasiado ambiente y queremos llegar abajo a comer así que media vuelta y a desandar nuestros pasos por donde hemos venido.


Como colofón a una mañana magnífica de montaña nos hacen sitio en un restaurante que también está lleno a rebosar.  Me calzo unos pimientos rellenos bien regados con sidra como Dios manda mientras pienso en la próxima visita que haré a este lugar para culminar la indomable gesta de las Peñas de Aia.




AQUÍ el track

Fecha real: 06/12/2015

Desnivel acumulado: 809m.

Distancia recorrida: 10km.

Tiempo invertido: 5h.








martes, 1 de diciembre de 2015

Punta Facera y Punta Burrambalo (2.146m)


¡Día grande! por fin en mucho tiempo, conseguimos quedar las jóvenes castoras originales casi en pleno y para celebrarlo quedamos con J.M.N. que siempre nos lleva a sitios majos, si es que vale un valer.  El lugar elegido es la Punta Burrambalo y componemos la "expedición" Cheles, Chus, Sergio, JM, Yeti, Bonito del Norte y Servidora.


Aparcamos los coches al lado del fontón de Aso de Sobremonte, atravesamos el pueblo y tras las últimas casas sale la GR15 a nuestra derecha.  La seguiremos hasta dar con una pista donde nos damos cuenta que buscamos otra senda que quedará más a nuestra derecha así que volvemos por la pista hasta encontrar a nuestra izquierda un hito que marca el comienzo de una empinada senda que atraviesa el bosque y hace alguna pequeña lazada que nos permite llanear un mínimo para soportar este primer tramo.


Salimos a una pista que seguiremos por nuestra derecha hasta poco antes de un muro de contención donde encontraremos un hito que marca la entrada a la senda que nos ha de llevar primero paralelos al Barranco Lana Puyuelo que queda a nuestra izquierda y luego en una lazada nos coloca en el hombro conforme se abre el bosque y salimos a la Majada de la Mallata donde paramos a almorzar, que con estas rampas que nos acabamos de jamar nos lo hemos ganado.


Desde aquí ya no hay pérdida: sobre nuestras cabezas se yergue la Punta Facera a la que arribaremos tras superar, cada uno a su manera, el lomo sobre el que ya pisamos una fina capa de nieve.  Las vistas sobre la cara Sur del macizo de Telera son impresionantes aquí, como impresionante resulta la preciosa vista de todas las estribaciones Sureñas que con un día como el de hoy, lo tienen difícil para esconderse y así llegamos a contemplar incluso el Moncayo o el Turbón inmediatamente en el lado contrario.  Es una panorámica perfecta.



Ahora solo tenemos que seguir el cordal dirección Oeste para culminar la Punta Burrambalo que nos recibe con un viento helador causante de nuestras prisas en hacer un par de fotos y emprender la bajada sin cambiar de dirección en busca de un collado desde el que, sin senda definida y buscando trazas de pisada de ganado, descenderemos hasta la pista que en dirección Sur, nos llevará a la Majada de Juan Freda donde pararemos a comer.  Re-emprendemos marcha por la pista que no abandonaremos hasta encontrarnos con otra pista que hace una curva muy cerrada, ésta es la que hemos transitado esta mañana y la volveremos a abandonar girando a nuestra derecha e inmediatamente a la izquierda cogiendo la senda de subida de esta mañana ya sin pérdida hasta los coches.







AQUÍ el track


Fecha real: 29/11/2015


Desnivel: 1.000 metricos de ná


Distancia recorrida: 11 kilómetros del ala


Tiempo invertido: 6 horas



viernes, 20 de noviembre de 2015

Pico (2.285 m) y Lagos de Ayous


Estamos en pleno “veroño” a primeros de noviembre y J.M.N. me propone subir al Pico Ayous completando la ruta circular que recorre los lagos homónimos.  Aunque ya he recorrido la zona un par de veces, no he subido al pico y, la verdad, este sitio es tan bonito que creo que nunca me cansaré de visitarlo.  Acepto la propuesta, así que el domingo nos encontramos en Biescas Bonito del Norte, José Miguel, Cheles, Kankel, Rober, Helena y Servidora de ustedes para poner rumbo al país galo.


Empezaremos en el Lago de Bious Artigues rodeándolo de manera que queda a nuestra derecha.  Pronto quedará a nuestra espalda para internarnos en un precioso bosque que terminará al abrirse el llano de la Gave de Bious donde nos desviaremos por la senda de la derecha indicada nos un cartel direccional.  No hay complicación, se trata de seguir la senda evidentísima que primero continuará por bosque para pronto abrirse en una media ladera al sol que hace nuestras delicias en un día de noviembre que parece casi de junio y así, a buen ritmo pero ya con apetito, llegamos al lago: el Roumasot, donde paramos a almorzar algo que nos estamos portando muy bien.



Continuamos por la senda, no hay pérdida, dejamos a nuestra izquierda el lago Du Miey y tras una rampa nos encontramos con el idílico lago Gentau que cierra el trío de los Lagos de Ayous presididos por el Refugio y Pico que les da nombre y al que nos dirigiremos ahora desviándonos a nuestra derecha por la marcada senda que va superando la ladera hasta el Col de Ayous donde giraremos completamente a la derecha para continuar a media ladera sorteando una cima secundaria que se separa de nuestro objetivo en un collado al que descenderemos antes de acometer una última subida por ladera herbosa hasta el pico donde algunos ya han llegado.  Las vistas son excelentes y podemos casi rascarle la panza al Midi d’Ossau que será omnipresente durante todo el día de hoy.





Tras la típica hartada de fotos y de dar buena cuenta de la bota de vino que ha traído Kankel, nos disponemos a bajar hacia el Refugio de Ayous que vemos a nuestros pies y de allí poner dirección al Lac Bersau que también se deja desear desde aquí.


Una vez en las inmediaciones del refugio, sólo queda continuar por la senda en dirección Sur dejando a la espalda el lago.  La cosa es superar una cuesta algo empinada que pronto nos aúpa hasta la cubeta del magnífico Bersau desde cuyo desagüe contemplamos el pico que queda definitivamente atrás.


Recorremos la orilla poco a poco, con calma, buscando el mejor rincón para hacer la parada larga de hoy y dar cuenta de bocatas, chocolates, cantimploras y botas rebosantes de mágicos caldos que nos hacen soltar la lengua y pasar buen rato bajo este cálido sol de otoño.

Lo siguiente es retomar la marcha tal como íbamos antes, recorriendo la orilla con el lago a nuestra derecha hasta un collado a cuya izquierda nos encontramos frente a frente con el imponente Pic Casteráu en cuya falda descansa el Lac Casteráu hacia el que descendemos sin mirar más atrás, que el tiempo apremia.


El Midi se refleja altivo sobre el lago mientras nos dirigimos a la última cuesta que habremos de superar antes de descender definitivamente, siguiendo marcas de GR, a la Gave de Bious donde cerraremos el círculo a la entrada del bosque a través del que, sobre nuestros pasos de hace unas cuantas horas, regresaremos al lago y más abajo a los coches mientras la luz empieza a escasear y la temperatura se acerca más a la normalidad de las fechas.







AQUÍ el track


Fecha real: 08/11/2015


Desnivel: 1150 m.


Distancia: 20 km.


Tiempo invertido: 8 horas




viernes, 6 de noviembre de 2015

Circular Valle de Estribiella-Valle de Aguas (Selva de Oza)


Tato y Novia tienen ganas de contemplar los colores otoñales y aunque sé que las hojas han caído ya, decido acompañarles a esta ruta que proponen por tener aspecto de bonita y variada pues su recorrido nos adentrará por el bosque de la Selva de Oza un rato y otro rato nos transportará por las faldas de la Sierra de Alano que dejaremos atrás a través de un pequeño valle poco transitado.


Aparcamos en la explanada a la izquierda justo antes de atravesar el Puente de Oza y empezamos a caminar siguiendo la senda que se inicia al lado del refugio forestal indicada con un cartel del Barranco de Estriviella.  El camino comienza duro y empinado acercándose poco a poco al cauce del barranco que trascurre a nuestra izquierda.  Al ganar altura y ya casi saliendo de un fácil resalte calizo, nos encontramos con un primer punto de interés de esta ruta de hoy: la Cascada del Barranco de Etriviella que hoy discurre poco caudalosa.


Un último esfuerzo y dejamos atrás el bosque para cambiar radicalmente de paisaje pues nos encontramos en el fondo del pequeño Valle horadado por cauce del Barranco Estribiella cuyo descenso deportivo se inicia aquí y de hecho, vemos un grupo preparando el primer rápel.  Paramos aquí a almorzar contemplando el paisaje y enseguida nos dirigimos, eligiendo la senda más ancha de las muchas que encontramos gracias al ganado, hacia el circo que cierra el valle presidido por Peña Forca y el Rincón de Alano que no se dejan ver por las nubes orográficas puñeteras que hoy esconden las bonitas cimas de esta zona.


Cuando estamos justo debajo de las paredes y parece que no vayamos a poder continuar, nos encontramos un desvío con hitos a derecha e izquierda.  Los nuestros son los de la izquierda que nos harán cruzar fácilmente el cauce del barranco, aquí naciente, para comenzar una empinadísima cuesta siguiendo la estrecha pero marcada senda que en unas lazadas nos dejará en el vallecito que precede al Collado de Lenito al que no nos dirigiremos pues por allí accederíamos a Peña Forca que no es nuestro objetivo de hoy.  Aquí las vistas se acrecentan y aprovechamos para hacer una corta parada y reubicarnos mientras contemplamos el Alano que antes no se dejaba ver y Chipeta a lo lejos. 




Hace un rato que he marcado un “waypoint” donde me parecía deberíamos haber girado a nuestra izquierda, sin embargo, hemos seguido los hitos y nos damos cuenta que estamos demasiado cerca del Collado de Lenito y ya deberíamos haber hecho el giro en busca del Valle de Aguas.  Decidimos darnos la vuelta y a media ladera rodear la loma que queda a nuestra derecha para no perder altura y poco a poco, por traza de senda de ganado situarnos en el collado cabecera del Barranco de Aguas hacia cuyo cauce bajaremos.


Dejando el cauce a nuestra izquierda y sin senda clara, recorremos el suave vallecito contemplando los sarrios corretear por las pedreras de nuestra derecha.  Cuando alcanzamos aproximadamente la cota 1650 giramos a nuestra izquierda cruzando el cauce y realizando un delicado flanqueo sin ninguna traza precisa y dejándonos guiar por el gps que nos sitúa justo encima del único itinerario que parece factible.  Alcanzamos las inmediaciones de una vaguada hacia la que debemos descender completamente fuera de senda en busca de algún punto de referencia pero no lo encontramos a pesar de que tanto gps como mapa nos marcan un refugio por aquí cerca, pero no lo vemos.  Hemos perdido bastante tiempo buscando la forma más cómoda de bajar y nuestros estómagos lo acusan así que una vez abajo, entre el Barranco de Aguas a nuestra derecha y otro pequeño torrente a nuestra izquierda, paramos a comer.

Mientras damos cuenta de los bocatas y otras deliciosas viandas, la vista se me centra en un matorral que medio tapa algún objeto metálico extraño y una especie de ruinas, lo que me da a pensar que quizá ese sea el refugio que tanto ansiamos encontrar.  En cuanto reemprendemos la marcha lo alcanzamos y concluimos que nuestro deseado Refugio de Aguas está completamente en ruinas.  Sin embargo, desde aquí sabemos que tenemos que encontrar una senda muy marcada que nos ayude a atravesar y descender el bosque al que entramos cruzando el pequeño torrente que poco más abajo se casa con el Barranco de Aguas y girando a nuestra derecha divisamos un hito que nos da entrada a la senda que “a cuchillo” nos baja hasta la carretera que recorreremos dirección norte (a nuestra izquierda) hasta reencontrarnos con la explanada donde tenemos el coche.


Añadiré que es una excursión ciertamente variada y sí, bonita.  Pero no la recomiendo como el paseo que nosotros esperábamos y menos todavía si no se está acostumbrado a caminar campo a través.  Es un itinerario más difícil que fácil.



Nuestro track AQUÍ (Falta el último cuarto de excursión porque me quedé sin batería)

Fecha real: 01/11/2015

Desnivel acumulado: 950m. (hicimos unos 200 de más)

Distancia recorrida: unos 10km.

Tiempo invertido: 6h.